T. +34 651 620 294
Pº de Zorrilla 58. 1º
47006 Valladolid · Spain
Etiquetas de vino Claves de diseño para triunfar

Etiquetas de vino Claves de diseño para triunfar

Si alguna vez te has visto en la tesitura de diseñar una etiqueta sabrás que es más difícil de lo que parece. Pero además, si la etiqueta es de vino, la cosa se complica.

Por un lado debes tener en cuenta las especificaciones técnicas como el tamaño, la forma, los colores, materiales o la línea corporativa… Y por otra, los términos legales  o las tendencias actuales que demanda el mercado y seguramente tus clientes.

Si echamos la vista atrás y nos ponemos a pensar en los vinos de toda la vida, no sólo los que se bebían en casa sino esos que se guardaban para grandes acontecimientos, la etiqueta  a simple vista marcaba la importancia de abrir esa botella. La diferenciación era clara, elige esta botella porque te hará importante, distinguido, destacado…Las líneas y colores eran clásicos y moderados, tirando hacia lo barroco y ornamentado. Destinadas a un público adulto y de cierta clase social. En resumidas cuentas… los vinos eran cosa de hombres. Bueno más bien de señores. La competencia era dura, pero no mortal. Cada gran bodega tenía su parte del cortijo y el diseño y el precio quedaban  en un segundo plano.

Cambio de tercio

Estés o no inmerso en el mundo de la enología,  seguramente te hayas percatado que el mercado ha cambiado mucho en los últimos años. Ahora si quieres competir, es más si quieres aunque sea una pequeñas parcelita del mercado, debes ponerte las pilas en conquistar a los consumidores, que ni mucho menos son aquellos señores de antes. Sea donde sea que vas a vender tu vino piensa que la etiqueta será tu escudo en la batalla para ganar las pequeñas guerras en el día a día. Y además de resistente debe ser identificativa y atractiva para otros. Haz que los consumidores se unan a tu ejército, que se cambien de bando y que se identifiquen con tus valores; tu marca será más fuerte.

Para ello desde Trama te aconsejamos que antes de encargar el diseño de tu etiqueta de vino, debes tener en cuenta las siguientes tendencias de mercado y estudiar quién es tu público, dónde está y cómo puedes llegar a él.

Ten en cuenta que el vino ahora también es cosa de mujeres. Es más, ellas pueden ser tus grandes conquistadoras. Y también de jóvenes, el vino ya no es cosa de personas de mediana edad. El vino es concebido como una experiencia y los jóvenes se sienten unidos a este concepto.

El vino se bebe en casa, pero también fuera de nuestras fronteras. El vino se regala,  el vino se prueba y disfruta de muchas maneras (catas, turismo, estética, gastronomía, jornadas temáticas…) ya no es un simple producto de consumo.

Además hemos vuelto a lo tradicional, al origen y a lo natural. Crece dentro de un ecosistema sostenible y tus clientes te lo agradecerán. Y es que queremos historias que nos emocionen, que nos hagan sentir bien, que nos trasmitan energías y la pasión que pones en tus viñedos sea también la nuestra. Ahora podemos comprar vino de la otra punta del mundo sin necesidad de salir de casa y dar nuestra opinión en redes sociales  a millones de personas. El panorama ha cambiado mucho, y esto debes aplicarlo a tus diseños.

Claves para diseñar una buena etiqueta de vino

¿Cómo es mi vino? Antes de diseñar la etiqueta de un vino necesitas saber todos los detalles del mismo. El color, el sabor, la categorización, sus matices, su añada…Todo absolutamente todo, pues cada una de sus características serán claves para dar forma a la etiqueta.

Objetivos y target. No es lo mismo diseñar una etiqueta de vino de autor destinado a unas pocas botellas, que un vino cuyo destino es venderse en países orientales. Antes de diseñar una etiqueta de vino hay que marcar una hoja de ruta con los objetivos comerciales del producto, así como delimitar quién será el principal comprador del vino. Puntos absolutamente claves que pueden suponer el éxito o el fracaso. No sólo del diseño, sino de la comercialización de tu vino. 

Naming. ¿Tienes ya el nombre para tu nuevo vino? Si vas a lanzar un producto es fundamental elegir el nombre adecuado. Y este, va depender mucho de los dos puntos anteriores. No obstante procura que sea corto y  fácil de recordar. Que tenga un punto original y un significado para tu público. Y por supuesto, que esté en consonancia con la identidad de tu empresa y resto de productos.

Información y mensaje. En el diseño ten en cuenta que la etiqueta debe llevar alguna información obligatoria, pero debes destacar el mensaje. Apuesta por lo emocional, di alto y claro que es lo que quieres transmitir. Conecta con tu target y haz que deseen beber tu vino. Llama su atención, hazles reír, soñar, querer, meditar…En definitiva provoca una emoción en ellos. Como consejo: aprovecha la parte frontal, la primera impresión es la que cuenta.

Packaging. ¿Tienes claro cómo va a ser tu botella? ¿Las medidas, la forma del cuello, la cápsula, el color exacto del vidrio…? Y las cajas, ¿ya sabes cómo serán las cajas, cuántas botellas cabrán, qué material necesitas…? El exterior sí que importa  y debes pensar en todo los detalles que empacan tu producto, para así poder diseñar una etiqueta adecuada y cohesionada con el resto de elementos.

Tendencias y técnicas.  Si ya tienes claro los 5 puntos anteriores, es hora de que nos pongamos manos a la obra. Con esta información y conociendo las tendencias de mercado o mercados a los que te quieres dirigir la comercialización del tu vino, podremos elegir entre qué técnicas empezar a trabajar: ilustración, diseño gráfico,  retoque fotográfico, tipografía…Así como entre diferentes estilos: vintage, minimalista, eco, tradicional, naif...

Materiales. Gracias a los avances en la tecnología y en las técnicas de imprenta y producción, el catálogo de materiales, acabados, tintas…Es casi tan amplio como la imaginación de un diseñador. Pero eso sí, asegúrate de elegir calidad. Actualmente triunfan los materiales texturizados o porosos. También los materiales anti-humedad y adhesivos tipo vinilo (muy recomendables para vinos blancos rosados, espumosos o incluso cervezas). No olvidamos las etiquetas con tintas que cambian de color, con glitter o incluso con relieve gracias a la serigrafía. Lo último en innovación son las tintas termo-sensibles, que avisan cuando el vino está a la temperatura adecuada para beber.

Con todo ello, y poquito de ayuda y buen gusto, conseguiremos una etiqueta perfecta para tu bodega, tu vino y sobre todo, su comercialización. ¿Te gustaría ver una propuesta?

Este es uno de nuestros últimos trabajos para el vino PLATEA.diseño de etiquetas para vinos